La única forma de saber lo que puedes recibir es probando en la realidad si se puede practicar el mito “SIEMPRE LO QUE DAS RECIBES”, sintiendo que la vida es una sola y no sabes de quien vayas a necesitar siempre debes ayudar a quien lo necesita, no importando si es tu enemigo o no lo conoces; porque algún día y de alguna manera será remunerado, pero nosotros y nosotras como personal de salud no debemos mirar ni raza ni etnia ni esperar algo a cambio solo tener un sentido de amor con nuestra carrera y brindar cuidado a las persona quienes lo necesiten.
Definitivamente esta es una ley que se refleja en la siembra y la cosecha, porque si la siembra la cuidas y le das todo lo necesario, podrás recoger buenos frutos; pero si por el contrario no cuidas de tu sembrado jamás recogerás frutos e incluso se pudrirán y perderás tus empeños.
Personalmente también funciona esta ley no solo se compensa a nivel interpersonal sino a nivel de la conciencia, por ejemplo; si tú llenas tu mete con pensamientos, visiones e ideas para cumplir las metas que quieres lograr y colocas todo de tu parte para poder lograr superando cualquier obstáculo será compensado con la satisfacción de las metas cumplidas y nuevas experiencias de actitudes positivas.
Si aplicaras en la vida esta ley se podría concluir con una gran felicidad para todas las personas porque nadie sería tan egoísta como en la actualidad lo podemos vivir, sino por el contrario haríamos el bien para poder ayudarnos cuando lo necesitemos. La verdad es que sería un mundo o mejor dicho un universo dispuesto a entregar lo que necesite el prójimo sin necesidad de solicitar una petición para alguna colaboración.
Las personas necesitaremos de los otros para que nos apoyen en las falencias que tengamos y así podernos compensar como personas ante los inconvenientes que se nos presenten.
Nosotros debemos compartir con las demás personas, no solo lo material sino también ideas, experiencias, la amistad y lógicamente mucho amor.
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